CURRUCA CABECINEGRA (Sylvia melanocephala)

La curruca cabecinegra (Sylvia melanocephala) es un ave pequeña, del orden Passeriformes que apenas si alcanza los 14 centímetros de longitud y unos 15-18 centímetros de envergadura.
En el campo es fácil su identificación, especialmente del macho pues presenta un cabeza negra hasta por debajo de los ojos y contrasta con la zona de la garganta que es blanca. Ademas el contorno de los ojos es rojizo. Las hembras por su parte tienen un color parduzco menos llamativo y el capirote de la cabeza no es negro, sino gris.
En España se distribuye sobre todo por la mitad sur peninsular, valle del Ebro hasta el País Vasco y noreste de Castilla y León. También está presente en ambos archipiélagos si bien en Canarias la subespecie presente no es melanocephala, sino leucogastra. En el resto de España se encuentra de forma muy escasa o ausente en la Cordillera Cantábrica, Asturias, Meseta Norte y Sistema Ibérico.
Habita especialmente en zonas de matorral y montebajo. Este hecho ocasiona que la especie esté ocupando áreas nuevas, dado que las zonas agricolas que se van abandonando suelen ser ocupadas por arbustos en los que establece su hábitat. No es muy común que haga vuelos largos, al contrario suele hacer vuelos cortos a poca altura y saltando de arbusto en arbusto o posándose esporádicamente en el suelo.
En Sierra Espuña es común verlo posado sobre lentiscos, romeros o espinos, por los que parece tener especial predilección, como es el caso de la fotografía, en la que se aprecia un macho en un espino negro (Rhamnus lycioides). Por otro lado se trata de un ave bastante esquiva, lo que unido a que suele confundirse con la maleza en la que habita dará lugar a que raras veces podamos observarla de cerca.
Su alimentación se basa fundamentalmente en insectos (especialmente larvas) y arácnidos, si bien también puede ingerir frutos o bayas como el lentisco, aceitunas de los acebuches, higos, uvas...
Actualmente no es una especie amenazada en España, sino que su población parece aumentar, especialmente en zonas de abandono de la agricultura como apuntabamos antes.
Gracias a Diego Conradi, colaborador de Biodiversidadvirtual (Aves) por la identificación del especimen.
En los siguientes enlaces puedes encontrar más información y alguna fotografía bastante buena:

LAGARTIJA IBÉRICA (Podarcis hispanica)

La lagartija ibérica (Podarcis hispanica) pertenece a la familia Lacertidae y se distribuye, según los mapas consultados, por la toda la península a excepción de la franja cantábrica asturiana y gallega y en el suroeste de la comunidad andaluza.
Miden entre 4 y 6 centímetros desde la cabez a la cloaca, siendo las hembras generalmente algo más pequeñas que los machos. La cola puede alcanzar el doble de longitud que el cuerpo, hasta 10 cm, con lo que la longitud total llegaría hasta los 16 cm en los ejemplares más grandes.
La coloración y el dibujo de la piel puede variar de unas zonas a otras aunque por lo general son de un color verdoso, presentando 2 franjas oscuras en los lados del cuerpo, así como manchas oscuras en el dorso dejando intuir un dibujo lineal.
Suele habitar en zonas rocosas, de forma que utilizan las piedras como lugar para tomar el sol y refugiarse rápidamente si se sienten amenazadas.
A diferencia de otros reptiles no suelen hibernar. Únicamente se refugian en sus guaridas sin salir cuando el tiempo es muy frío, permaneciendo activas el resto del tiempo.
Se alimenta de insectos y arácnidos pequeños y a su vez es depredada por numerosos animales como el lagarto ocelado, culebras, aves...
El celo se producen entre marzo y junio, pudiendo las hembras realizar varias puestas durante estos meses. Las puestas varian entre 1 y 5 huevos que se incuban a temperatura ambiente y eclosionarán en un periodo variable de 40 a 80 días.
Más información:

LAGARTIJA COLIRROJA (Acanthodactylus erythrurus erythrurus)

La lagartija colirroja (Acanthodactylus erythrurus) es una especie que puede alcanzar los 23 cm incluyendo la cola, y hasta 8 cm desde la cabeza la cloaca. Su cabeza es grande, lo que unido a su longitud puede hacernos pensar que se tratase de una cría de lagarto, si bien su coloración no es igual.
Se trata de una especie adaptada a los terrenos arenosos y de vegetación escasa.
Presenta en los dedos escamas imbricadas (superpuestas) de forma que consiguen una mayor sustentación en la arena o terrenos con facilidad para disgregarse.
Es más activa durante las horas centrales del día, momento en el que aprovecha para salir a cazar pequeños insectos que son la base de su dieta, aunque en primavera y verano también pueden ingerir vegetales. Se sabe que puede incluso practicar el canibalismo.
Durante los meses de invierno generalmente se retira a sus madrigueras para evitar el frío.
Se desplaza de forma rápida, levantando la cola de forma característica y buscando la sombra de algún matorral si se siente amenazada. En carrera puede alcanzar casi los 3 metros por segundo. Si es seguida realiza carreras rápidas y cortas, realizando paradas para comprobar la distancia y posición de su perseguidor.
Alcanza la madurez sexual en torno al año y medio, produciéndose las cópulas entre abril y junio. La puesta varía entre 1 y 8 huevos que eclosionan a los 70 días. En ocasiones, en las zonas más cálidas realizan dos puestas anuales.
Habita en el centro y sur de la Península Ibérica y en el norte de Marruecos y Argelia.
Más información en:

GORRIÓN (Passer domesticus)

Omnipresente, el gorrión (Passer domésticus) no podía faltar en Sierra Espuña. Podemos encontrarlos por todo el parque natural, sin embargo se concentran más en las áreas urbanas. Además los ejemplares que conviven con el ser humano suelen ser más sociables y menos asustadizos que los que tienen su hábitat lejos de este.
Es un ave paseriforme, de hecho las aves paseriformes toman su nombre de "Passer", es decir las que tienen forma de gorrión.
Los gorriones son omnívoros, pudiendo alimentarse de insectos, semillas, desperdicios del ser humano... Esto es lo que ha favorecido su proliferación por todo el mundo, a excepción de la Antartida. No obstante es originario de Eurasia.
Los gorriones son muy territoriales y no dudan en atacar a otros congéneres u otras especies si sienten su nido amenazado. Como curiosidad cabe destacar que en la defensa de la nidada, los machos atacan a otros machos mientras que las hembras atacan a las hembras.
El plumaje es diferente en machos y hembras. La principal carácterística para diferenciar a los machos es la mancha oscura que presenta su plumaje en el área del pecho. En las hembras y en los machos jóvenes esa mancha no está presente.
Los machos también tienen un plumaje bermejo irregular en las alas y en la parte posterior de la cabeza, mientras que en la hembras y ejemplares jóvenes esa coloración no se da.
Además los machos presentan una especie de jerarquía en base al plumaje: cuanto más grande y oscura es la mancha oscura del pecho mayor es el ejemplar y cuenta con un mayor "rango" respecto a otros machos.
En la fotografía adjunta podemos observar un macho relativamente joven, ya que la mancha oscura de su pecho apenas si empieza a emerger.
Más información en estos enlaces:

PINZÓN VULGAR (Fringilla coelebs)

Se trata de un ave paseriforme, que como ya dijimos en otra entrada del blog, hace referencia a aquellas aves parecidas a los gorriones.
Es un ave muy común en toda Europa, extendiendose también por el norte de África, Oriente Medio, Canarias y Madeira.
Pese a no ser migratoria sí busca lugares cálidos en invierno.
Anida en los árboles, construyendo su nido y ocultándolo con musgos y líquenes. Suele preferir el bosque como hábitat, aunque puede vivir sin problemas en zonas habitadas y agrícolas.
Suelen alimentarse de semillas, aunque los ejemplares jóvenes, a diferencia de otros pinzones también caza insectos.
C, Linnaeus bautizó a esta especie en Suecia como coelebs, que significa "soltero", dado que las hembras salen en invierno mientras que los machos no lo hacen.
El ejemplar de la fotografía es una hembra, de colores menos vistosos y llamativos que los machos.
Más información:

PETIRROJO (Erithacus rubecula)

Se trata de un ave paseriforme, es decir similar a un gorrión, que se distribuye por toda Europa y migra parcialmente al norte de África.
Los ejemplares jóvenes carecen del color rojizo del pecho por el que reciben su nombre, siendo los ejemplares adultos los que presentan dicha coloración.
Se trata de un ave muy confiada, que no suele huir fácilmente ante la presencia de personas, por lo que son relativamente fáciles de observar.
Son omnívoros, pudiendo alimentarse de insectos y arañas pequeñas así como de frutos o bayas en otoño.
Más información en los siguientes enlaces: